La Arestocracia: Del Niño al Capitán Veneno

La ‘Arestocracia‘ vislumbra un murmullo en el palacio del Falla, llegan a miles los peregrinos, de todos los rincones del mundo sin importar raza ni edad se postran ante el templo dónde no hace mucho, un mito hizo crujir todos y cada uno de sus cimientos.

Portan como una religión aquel credo como el verso más inmortal de todos, como el eco más profundo que desgarra el alma de una chusma selecta que no tiene consuelo, que grita llora y canta… todo de una vez. Ha muerto el Capitán Veneno, ha nacido la leyenda eterna.

La niebla se atisba por luna más densa, son tiempos oscuros, nublados y dubitativos. Llueve en el interior de esos corazones sin consuelo, retumban aún calientes los sones de aquella Gaditanissima, de aquel Chele…de aquella palabra incontestable de capitán.

Aquella sangre azul de esos nobles que contemplan la última despedida está llena del mismo veneno, del mismo carnaval, y es por eso que Antonio, el niño de Santamaría, decide rendirle pleitesía al capitán, al mito, al poeta…al amigo por el cual las guitarras no suenan igual que siempre.

La vida no dura más que un estribillo

La vida no dura más que un estribillo‘, nos cuentan estos aristócratas entre un sinfín de versos afilados y letras que se guardan en la conciencia y el corazón. Pero es que son tantísimas las lunas ya sin el Capitán, que su chusma selecta, la de siempre, sabe que aquello es una verdad a medias…

Porque sí, tal y como venimos nos vamos en un suspiro, pero durante aquel periodo, serán aún más las lunas que contar…lunas que ya no serán meses, sino que se convertirán en años, en lustros y en décadas…y no, no será todo tan corto como un estribillo, ojalá, porque escuece, porque hiere, porque duele tantísimo…

Pero Antonio Martínez Ares y su comparsa, han dejado a la chusma selecta una letra más, unos nuevos versos para acurrucarlos junto al credo y junto al batallón infinito de letras que dejó Juan Carlos Aragón. Una letra que sirva como barca en mitad de esa borrasca…

La arestocracia brinda reverencia

Comparsa la chusma selecta

La Arestocracia rinde reverencias y su máximo respeto al Capitán, llegan con una comparsa con muchísimo mensaje, con el verso cortante como el filo de un cuchillo, pero también con el corazón en la mano, para tendérselo como ofrenda a la chusma que seguirán sin nuevas coplas para los siguientes febreros.

Del Niño al Capitán, la Chusma Selecta como el guiño más cómplice, como el compromiso de comunión y engrandecimiento del Carnaval de Cádiz más profundo, el camino que ambos siempre han querido y buscado…

El guasón de Juan, le pidió en su último encuentro que le hiciera un cuplé, y Antonio le devolvió toda una presentación.

Letra presentación La Chusma Selecta

Por el castillo del Falla corre un rumor
un triste duelo se escucha desde el salón
vienen a miles, los peregrinos…
El rey ha muerto, su verso caliente está
un funeral con honores de carnaval
hoy el rebelde…ya es divino
una guitarra malherida se ha puesto en pie
se abren las puertas a un silencio atronador
sus huerfanitos, lloran de pena
sus adversarios, su chusma selecta
le brindan el último credo en la plaza de su corazón
Por el castillo del Falla corre un rumor
un triste duelo se escucha desde el salón
vienen a miles, los peregrinos…
Y si alguien jura venganza por esta copla a un compañero
no sabe con quién ha dao, yo llevo el mismo veneno
Canta gaditano canta,
que es el milagro de este sur tan desgraciao
canta hasta que te sepa a sangre la garganta
canta alma mía, que nos quiten lo cantao
canta, canta la Tacita
porque la vida sólo dura un estribillo
Niña de plata déjame que me repita, me repita, me repita
¡Dale fuerte a ese platillo!
Otra batalla, otra pasión. Otra pelea, la misma ilusión
de las cenizas de un pobre caníbal nació un caballero
Cielito mío, ¡ya estoy aquí!
para ganar, pa perder, pa sufrir…
dame compás, tu bendito compás
otra vez por febrero
Que Cádiz no tiene reyes
sólo poetas de carnaval
Y pa poeta, poeta !Mi capitán!

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