El Carnaval de Cádiz guarda muchas historias interesantes, sobre todo intra-historias, esas de las que poco conocimiento se tienen o que están contadas desde una única perspectiva, dejándonos a nosotros el criterio de la veracidad de las mismas. Uno de esos casos podría ser el de la polémica entre Charrúas y El Brujo.
Esta historia la contó en el año 2012 el autor de coros Rafael Pastrana Guillén, en una columna de opinión del Diario de Cádiz.
Nosotros únicamente os relatamos lo que Pastrana contó en aquel artículo. Como siempre, la verdad o no de lo que allí sucedió únicamente la conocen los protagonistas que estuvieron aquella noche presentes.
¿Qué pasó entre Charrúas y El Brujo?
Nos vamos al año 1995, por aquel entonces Fali Pastrana formaba parte del jurado de comparsas, junto a José Luis López Estévez y Juan José Ramírez.
Juan José Ramírez es sustituido por el fallecimiento de su padre y entra en el jurado Alfonso Abrudueño Del Río. Por aquel entonces, los puntos del acta se anotaban a lápiz, por imperativo legal, una estratagema del Patronato que según Pastrana se hacía para poder cambiar luego los puntos a su antojo.
El concurso trascurría con normalidad, y según los puntos del jurado, la comparsa de Antonio Martín ‘Los Principiantes’ se había quedado descolgada de la pelea por el primer premio.
Este máximo galardón quedaba entonces a merced de dos agrupaciones: Charrúas y El Brujo, las comparsas de Joaquín Quiñones y Antonio Martínez Ares respectivamente.
Según nos cuenta Fali Pastrana, la comparsa de Martínez Ares era su favorita, así que le otorgó la máxima puntuación en los pasodobles, cosa que pareció no gustarle mucho al resto de integrantes del jurado.
Al percatarse de esto, estos dos integrantes decidieron modificar sus votos, para que fuese la agrupación de Joaquín Quiñones la ganadora, algo que no hubiese ocurrido si los puntos se hubiesen puesto a bolígrafo, como se hace hoy día.
Un gran revuelo entre el jurado
Lo rocambolesco, según cuenta Fali Pastrana llegó después, con los puntos ya sabidos y los premios ya preparados para ser anunciados llegó la visita del Concejal de Fiestas del Ayuntamiento y el presidente del Jurado.
Ambos felicitaron la labor de los vocales, pero sugirieron hacer una modificación. Y es que la comparsa Charrúas, llevaba una cuarteta donde no hablaban muy bien del concejal, y no les hacía gracia que una comparsa fuese por toda Andalucía hablando mal del Ayuntamiento de Cádiz.
Sugirieron dar el primer premio a ‘El Brujo’ y el segundo premio a Charrúas. Los que habían cambiado los votos simplemente asintieron diciendo que les daba igual, y que estaban de acuerdo.
Pero Pastrana montó en cólera y advirtió que denunciaría todo a la prensa si se pensaba hacer todo aquello.
La resolución de la historia ya la conocemos, Charrúas ganó el primer premio y la comparsa El Brujo obtuvo finalmente el segundo.
Pastrana por su parte, no cambió los puntos ni en el palco, ni en el camerino, pero argumenta que fue acusado por el resto de ser el ‘culpable’ de que aquella noche no ganara la comparsa de Antonio Martínez Ares.
Fuese como fuera la historia, aquel año 1995 se vivió una fantástica Gran Final en la modalidad de comparsas y el premio perfectamente podría haber ido hacia un lado como hacia otro, que como ya se dice siempre, el libro de los gustos siempre está en blanco.
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